PRIMER MODELO EDUCATIVO DEL IES RAMIRO DE 

MAEZTU. Antonio Magariños


Finalizada la Guerra Civil, buscar la normalidad en todos los ámbitos era el objetivo prioritario en toda la Nación.  Se interesó por la tarea que desde mediados del siglo XIX se había desarrollado en España. Sin  duda alguna la educación era de gran prioridad.

“La Nueva España” buscaba en este campo sentar sus principios. Para ello, había dos modelos, el Instituto-Escuela y el  alemán que, en ambos casos estaba influenciado, ya desde el siglo XIX, cuando se puso en marcha la necesidad de modernizar el modelo educativo español, Existían diversas corrientes educativas en Europa, entre ellas el Krausismo en el que se inspiró la Institución Libre de Enseñanza (ILE). En la búsqueda de programas de enseñanza primaria y secundaria el Ministerio de Educación se interesó en conocer los modelos que en otros países europeos sirviesen para desarrollar programas  pudiesen estimular el amor al país y ofrecer a los estudiantes preparación para su actividad profesional

Fueron varias las personalidades que en estas fechas realizaron estudios o artículos sobre temas culturales diversos, Lenguas Clásicas, Filosofía, Arte e incluso temas religiosos. Entre ellos Catedráticos de Universidad como Entrambasaguas, Tovar, Concha Espina, Lorenzo Riber, Eleuterio Elorduy, Pascual Galindo… Se quería imprimir de esta manera y con todos el interés que las autoridades mostraban por la formación de los jóvenes.

Del modelo educativo alemán que conoció D. Antonio, cuando visitó el país, le interesó la práctica rápida y enérgica, que no sólo estaba en los deportes de campo, sino también en las enseñanzas científicas y humanísticas, en ellas los profesores y educadores debían mostrarse activos y dinámicos para mantener la atención de los alumnos.

Interesaba favorecer la convivencia. Por este motivo, los albergues y campamentos juveniles estaban orientados para desarrollar la convivencia y las actividades deportivas.

Comprobó que los alumnos no eran elegidos por su condición social y estatus económico, sino por sus cualidades, porque debían educarse para estar al servicio del Pueblo y del Estado.

Una primera etapa de la formación de los jóvenes terminaba a los 10 años, la siguiente  finalizaba a los 16 años. En ambas se estudiaban diversos idiomas, y se hacía especial hincapié en el estudio del Latín.

Centrándonos en lo que a la Educación Primaria y Secundaria se refiere el IB Ramiro de Maeztu de Madrid emprendía la tarea de educar, utilizando los espacios que durante la Segunda República fueron del Instituto-Escuela. En esta tarea recogieron el modelo del IE y también el modelo alemán.

ANTONIO MAGARIÑOS.